Del carrito a la conciencia
Los dilemas del comprador consciente
Los datos nos dicen que incluso a los Eco-Actives, el grupo más concienciado con la sostenibilidad de las ecotribus, les preocupa el precio. No se trata solo de una barrera económica; es un obstáculo importante en el camino hacia la sostenibilidad que exige atención inmediata.
Entonces, ¿cómo debemos considerar estos aspectos sensibles de la compra? Nuestras conclusiones revelan algunos indicios claros del camino a seguir. El primero es un aspecto en el que hay que centrarse: los hogares más pequeños, especialmente en Argentina, están superando a los más grandes en prácticas ecológicas. Un porcentaje impresionante del 35% de los hogares con apenas 1-2 personas se identifican como Eco-Actives. No se trata sólo de una estadística intrigante; es un recordatorio de que los hogares más pequeños, aunque quizá no compren en cantidades comparables a las de los hogares más grandes, son poderosos desencadenantes de comportamientos ecológicamente conscientes, sobre todo si reconocemos que los Eco-Considerers representan otro 43% de este segmento de hogares.
Estas cifras deberían hacernos reevaluar cómo pensamos en el futuro. En mercados como Argentina, donde los aspectos menos obvios de esta tendencia son más fuertes, esta estadística tiene un impacto tangible en todo, desde el tamaño de los envases hasta las estrategias de precios. ¿Por qué? Porque estos hogares más pequeños suelen verse menos afectados por las presiones de costes que sufren las familias más numerosas. Esto indica la posibilidad de que los hogares más pequeños, especialmente los formados por parejas jóvenes, puedan continuar con sus prácticas sostenibles a medida que el hogar crece con el tiempo. Y si el hogar sigue siendo pequeño, como sería el caso de los jubilados o las parejas cuyos hijos se van de casa, es probable que las compras sostenibles se fortalezcan aún más en tiempos de bonanza económica.
Aprovechando las oportunidades ecológicasCaso Brasil E-commerce
También identificamos otra oportunidad. Parece que quienes dan prioridad al planeta no son meros compradores ocasionales; son el modelo del consumidor consciente. Este grupo exigente aporta un enfoque intencionado y resuelto a su experiencia de compra. No es solo una característica a tener en cuenta; es una pista importante para los minoristas y las marcas. Indica una acción que va más allá del mero reconocimiento - exige un cambio estratégico en la experiencia de compra.
¿Cómo? Simplificando su viaje. Se trata de un grupo de personas que hacen listas. Estos consumidores no se limitan a elegir productos de las estanterías, sino que eligen un estilo de vida en el que cada producto debe estar en consonancia con su visión más amplia del planeta. Pónselo fácil. Ya sea agrupando los productos ecológicos para facilitar la compra o perfeccionando la interfaz de usuario de las plataformas de comercio electrónico, la recomendación es clara.
Considera incluso la posibilidad de integrar electrodomésticos inteligentes que puedan ayudar a estos consumidores a tomar decisiones sostenibles con facilidad. En otras palabras, hacen que la experiencia de compra sea aún más fácil para estos consumidores motivados. No se trata solo de comodidad, sino de crear un ecosistema que fomente y mantenga el consumo consciente.
Aquí hemos ido más lejos para comprender el impacto del precio. Hemos introducido los grupos de presión de los hogares cuyos datos recogemos regularmente en muchos de nuestros mercados. Los hogares se describen a sí mismos como "confortables", "que se las arreglan" y " con dificultades", y su gasto tiende a reflejar estos sentimientos.
Como podemos ver, la historia de la polarización se está desarrollando nuevamente. Y debemos reconocer que la fijación de precios sigue siendo un importante punto de atención como barrera potencial.